Cruce de Caminos es una serie de 8 episodios que explora las historias de vida de individuos influyentes en sus comunidades. Donde se revelan experiencias únicas y decisiones difíciles en tiempos de conflicto armado.

Carmelina Sánchez

El 18 de octubre de 1998, una explosión de dinamita colocada por la guerrilla del ELN en el oleoducto de Machuca, Antioquia, mató a 84 personas e hirió a 30. Carmelina Sánchez, originaria del Chocó, enfrentó la tragedia con sus 15 hijos, y un espíritu de determinación y resiliencia.

Delicia del Socorro Castillo

A los 15 años, Delicia del Socorro Castillo conoció a Efraín Basilio Antonio en San Andrés, Córdoba, y se unió a su lucha por la tierra y el activismo social, dejando atrás a su familia. Juntos tuvieron 12 hijos y se trasladaron a Sucre, donde continuaron con la reclamación de tierras. 

Dolores Borja

Dolores Borja, nacida y residente en Pueblo Viejo, enfrentó múltiples desafíos desde temprana edad, incluyendo el cuidado de su madre enferma y la crianza de su hija a los 17 años. En 1985, participó en un plantón por la mortandad de peces en la Ciénaga Grande, lo que llevó a un proyecto de cría de ganado con 75 mujeres.

Gonzalo Gasca

Gonzalo Gasca nació en la comunidad indígena Koreguaje en el departamento del Caquetá. Desde niño, aprendió los conocimientos tradicionales de su pueblo, como la pesca. Aunque soñaba con ser cantante, la presencia de grupos armados en su región marcó su vida. 

Jorge Osorio

Jorge Osorio nació en Neiva y se trasladó con su familia a San Vicente del Caguán, Caquetá. Desde joven, trabajó en el campo, enfrentando el reclutamiento de la guerrilla. A los 25 años, decidió buscar su propio camino y se convirtió en un hábil operador de motosierra.

José Heberto Rengifo

José Heberto Rengifo, originario de Riosucio, Chocó, enfrentó la decisión de quedarse en su tierra natal, dedicada a la agricultura, la caza y la pesca, o buscar nuevos horizontes. A los 15 años, se trasladó a Quibdó y luego a Medellín, donde se casó y comenzó una nueva vida que lo llevó a ingresar al ejército.

Piedad Cortés

En 1992, a los 18 años, Piedad Cortés enfrentaba una vida limitada por la violencia y la falta de oportunidades en Algeciras, Huila. Marcada por experiencias dolorosas con grupos armados, se vio obligada a mudarse a Neiva. Sin embargo, allí fue estigmatizada y señalada como guerrillera, lo que la llevó a contemplar el suicidio.

Silsa Arias

Silsa Arias nació en el resguardo indígena Kankuamo en la Sierra Nevada de Santa Marta, donde el colegio solo ofrecía hasta cuarto de bachillerato. Después de mudarse a Barranquilla para estudiar, enfrentó la desaprobación de su padre y decidió desafiar su autoridad, regresando sin su consentimiento y sosteniéndose por sí misma vendiendo mochilas.